miércoles, 8 de junio de 2011

Catarsis (Parte 2)

-Ha sido traumático –inició su dialogo con voz áspera y trémula- haber visto cosas tan horribles. Un hombre cegado por el odio, perdiendo por completo el juicio por rencor destructivo. Pude verlo, acorralando a sus víctimas en la más deplorable condición, llegar hasta la locura extrema, actuando como animales, perdiendo cualquier indicio de raciocinio. Solo impulsos bestiales, en una venganza de origen incierto que no ha dejado ningún tipo de satisfacción, sólo...muerte.
Esta última palabra fue pronunciada por una voz gutural e iracunda que quedó resonando en la mente de los espectadores. La figura, antes amenazadora y atemorizante, ahora se veía desesperada. Otra figura de tamaño mayor y aterrador, de movimientos bruscos y encolerizados, atravesó el escenario de manera fugaz. Apenas se detuvo un instante y paso un ágil brazo por el cuello del acobardado ser. Luego desapareció y este último se dobló, víctima de un agudo dolor. Poco duró su agónico final. Se desplomó y su vida expiró mientras su cuerpo caía, produciendo un sonido seco sobre la madera del suelo. La luz se apagó por un breve instante.
Una nueva luz, ahora de color ocre se encendió sobre el mismo escenario, propiciando una atmósfera más tranquilizadora. Seis personas estaban repartidas en el escenario. Todos estaban sentados en un comedor donde rebosaba el lujo y la riqueza. Sus ropajes eran dignos de la más alta sociedad. El escenario alrededor de ellos simulaba un sitio de elegancia excesiva. El aroma de los manjares sobre la mesa se regó rápidamente dentro del edificio, despertando en el público un gran apetito. Los personajes disfrutaban de una festividad derrochando sus riquezas. Era una velada donde predominaban la lujuria, dipsomanía  y  lascivia en su más degenerada expresión. A medida que se desarrollaba el cuadro, una fila de sirvientes entraban y salían del escenario, trabajando como esclavos sin oponer resistencia a las más absurdas peticiones de los huéspedes.
-Estos goces que podemos disfrutar hoy –dijo uno de los comensales en medio de una embriaguez que le entorpecía el habla y hacía de su postura un vaivén ridículo- son gracias a la vida que algún dios nos ha dado. Porque nuestra sangre real y pura es digna del más alto linaje.
Alzó su copa, en señal de un brindis y mientras los demás lo imitaban, con un grito enardecido elevó los ánimos y se bebió el contenido de su copa de un trago.
Los diálogos continuaron extendiendo la simulación del festejo en aquella obra de teatro que se tornaba más interesante para los espectadores. Sin embargo entre ellos un hombre sentado en las últimas filas no se deleitaba con aquella manifestación artística de la visión de un director. Por el contrario se sentía incómodo en aquel encierro, envuelto en la oscuridad, sabiendo que estaban aislados del exterior, mientras observaba hombres en actividades que le resultaban depravadas.
La escena terminó poco antes de desencadenar la fiesta en una ocasión viciada. La luz se apagó y de nuevo el público se vio envuelto en una densa oscuridad. Los comentarios inundaron el teatro hasta que el público enmudeció ante la aparición de una nueva escena. Aún ignoraban lo que iba a acontecer a continuación.
Continuará...
Por Camilo

5 comentarios:

  1. Muy buena historia donde se conjugan emociones, sentimientos y vicios. Un gran trabajo que obliga a esperar lo que sigue. Un trabajo impecable con secuencias bien narradas y riqueza de imágenes. Un abrazo

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  2. Sigue la intriga. Unas copitas de lo que estaban bebiendo no nos vendría mal, para mitigar la espera, no don Camilo? Un abrazo.

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  3. gracias por el paseo sR!, nos estamos viendo y leyendo ;)
    marcus

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  4. Alma Mateos Taborda: Gracias por el comentario y por visitar. Espero verla por aquí de nuevo.
    Netomancia: ¿Invita o invito? Gracias por visitar y aprovecho para recomendarle a los demás visitantes su blog. No me pierdo cada nueva historia.
    Marcus: Gracias por visitar y por detenerse a comentar. También muy bueno su blog. "Nos estamos viendo y leyendo".

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  5. Y mire, vamos mitad y mitad y tomamos por largo rato.
    Pero en unos minutos, ahora voy a leer las dos partes que me faltan!

    PD: Gracias por la publicidad, cuánto le debo? :P

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